En aquel tiempo dijo Jesús: «Al principio, Dios creó el hombre y la mujer. Por eso el hombre a su padre y la madre, para unirse a su esposa, y serán los dos una sola carne. Por lo tanto, ya no son dos sino una sola carne. Lo que Dios ha unido, el hombre no lo separe. »
Palabra del Señor.